martes, 26 de enero de 2010

En Saint Martins y playa Almarta



Después de estar 3 meses sin salir de Dhaka (bueno, sin incluir algunos paseos a los alrededores), por fin pudimos hacer un viaje para conocer un poco mas de Bangladesh. El plan, que surgió solo una semana antes, fue ir a la única isla de corales en la Bahia de Bengal: Saint Martin.

Con un recorrido largo, que inicio a las 6pm en Dhaka y termino a las 11:30am en la isla, pude ser testigo del transitorio cambio en el paisaje y clima del sur del país. Nada mejor que perder la necesidad de usar chaquetas, bufandas y medias, y empezar a desear el vestido de baño y las chanclas de plástico .

La llegada a la isla es espectacular. Desde el ferri se alcanzan a ver las blancas playas y las aguas azules en donde pronto nos estuvimos bañando. Aunque tuvimos pequeños inconvenientes con el hospedaje al principio, no fue sino que consiguiéramos lugar para dejar las maletas cuando ya estábamos metidos en el mar.

Los del paseo

La comida fresca de mar no se hizo esperar y comimos cangrejo, pescado en todas sus versiones de la cocina local y muy buenas parathas. Durante la noche pudimos ver las estrellas que siempre se esconden en Dhaka, pero eran tantas que por momentos pensé que eran de mentiras. Incluso al principio confundí la luz de la luna con un poste de luz (es en serio). Me tomó tiempo darme cuenta de que no habían postes en la playa y que la luz que usábamos para ver el camino era de la misma luna. Creo que este es el lugar mas remoto y apartado de centros de luz en el que he estado, porque nunca antes había visto una luna tan brillante y tantas estrellas juntas.

Durante el segundo día decidimos ir en búsqueda de lugares más paradisíacos y terminamos en Cheera deep, una isla a 20 minutos en bote de St. Martin. Desembarcamos en una playa bonita pero rocosa y nos dispusimos a caminar para encontrar un buen lugar para acomodarnos. Luego de una buena caminata, varias paradas a tomar agua de coco y más experiencias insólitas que solo suceden en Bangladesh, llegamos a una playa sin nombre que, hoy, se ha convertido en una de mis favoritas.

Judith, Adeel, Yo, Laura, Raj y Rafaela

Es una playa de aguas transparentes, tan claras que reflejan el azul del cielo. La arena a su interior es suave y relajante como el barro o la arcilla, tan relajante que me la quise untar en la cara como si fuera mascarilla. No tiene olas, así como a mi me gusta, y su temperatura es perfecta: ni muy fría ni muy tibia. También es amplia, tan amplia que aun con mi corta estatura pude caminar más de 100 metros hacia lo profundo sin ahogarme, sin encontrar rocas que lastimaran mis pies u olas que me hicieran devolver.
Pregunté cual era el nombre y me dijeron que no tenía. Así que la bautizaron BEACH ALMARTA, que significa Playa de Martha. Entonces ya saben, si alguno va a Saint Martin en el futuro, deben preguntar por la mejor playa del área: Almarta 

En la tarde del día siguiente el regreso melancólico se dio inicio y decidimos enfrentarlo con el sueño y el cansancio que deja el sol y la playa. Después de 2 horas en ferri, 6 horas en un bus hasta Chittagong y otras 6 en un bus VIP (realmente VIP), llegamos a Dhaka en la madrugada ya no tan fría. Parece que nos trajimos un poquito del sol de St. Martin y el clima ha empezado a mejorar.

Regresando... pero sin ganas de hacerlo

Ahora me encuentro en mi computador escribiendo esta nota tratando de guardar en ella el recuerdo de uno de los lugares más bonitos en los que he podido estar. Si lees este post, no lo dudes… ve a Saint Martin y no se te olvide preguntar por playa Almarta!

Una ultima foto en Playa Almarta

3 comentarios:

nómadas y viajeros dijo...

Me gustó la redacción, pero más que eso, me gustó que colocaras mucahs fotos ilustrativas.

Besos.

Francisco dijo...

Hola Marthy!!!

Que bueno que haya encontrado este blog, que no sabía que habías creado. Me encanta tu prosa (colombiana, cálida, llena de ritmo y de buena lectura) tanto en este post en concreto como en todo el blog, que he leído ávidamente. También es precioso haber encontrado a una expatriada acá que pueda mostrarme sus sensaciones en esta ciudad que te sitia y te gobierna sin que te des cuenta.

Un besote!!!

PD: Sí, creo que os habéis traído el calor de la isla, porque el sol ya estaba aqui, se llama Martha, jejejje... Ah, y algún día iré a tu playa...

rafaeℓa dijo...

St. Martins BEEEEACH!
ahora, para el projimo viaje, (que no tarde 3 meses!) solo necesito un biquini, jeje!
besos chica! :)